Ganó, pero todavía está en deuda

Se espera mucho de este nuevo modelo, con grandes figuras que llegaron para terminar de dar el salto de calidad, pero al igual que si archirrival, no empezó derecho la temporada. Fue sorprendido por Instituto de Córdoba que por momentos le manejó el partido (algo impensado cuando se enfrentan al equipo de Gallardo, y sobre todo intolerable para el Muñeco). Se espera que Enzo Pérez sea el termómetro en mitad de cancha, que Galoppo y Meza tengan juego asociado con dos laterales que se destacan por sus corridas por las bandas. Pero la Gloria cortó esos caminos y River no fue capaz de torcer el juego impuesto por Instituto. Borja es un terrible goleador, pero ¿es el delantero que necesita el juego de Gallardo?. Pocas veces se retrasa a tapar la salida de los rivales, a presionar, algo característico en los equipos del Muñeco. Entonces, ¿qué vale más? Un jugador que hace goles o alguien que ayude al equipo a que haya varias opciones para desnivelar el marcador. Goles ganan partidos, es cierto, pero si se encuentra una defensa sólida como la cordobesa y la de Platense de la primera fecha, ¿cómo se tuerce la historia? Será cuestión de ver la estructura y modelo de equipo que quiere perfilar Gallardo, porque nadie duda de la capacidad goleadora del colombiano. Si desea mantenerlo entre los once, deberá brindar de armas a sus medios para modificar el esquema de juego cuando, por las bandas, no surgen efecto las combinaciones. Está a tiempo, recién comienza, y lo bueno para River, es que Gallardo tiene banca y espalda.